Defenderse hasta con la vida, parecería
ser el lema de estas hormigas capaces de explotar para matar o contener al
enemigo cuando están en situación de peligro o combate territorial asfixiando
al enemigo con una secreción tóxica y, a menudo, mortal.
Aunque se conocen unas 15
especies de este tipo, la matoria viven en las selvas tropicales
de Borneo, Tailandia y Malasia
Esta descripción se realizó luego
de que un equipo internacional de entomólogos, botánicos, microbiólogos y
químicos estudiaron a fondo al grupo de hormigas Colobopsis explodens ,mejor conocido como “hormigas
que explotan” debido a su comportamiento defensivo.
Estas hormigas son capaces de romper la pared de su cuerpo y
expulsar una secreción amarilla pegajosa e irritante. Sin embargo, esta
capacidad sólo la poseen los trabajadores menores; las castas más altas tienen
otras características, como grandes cabezas en forma de tapón que usan para
cerrar las entradas de los nidos a fin de que no sean invadidos por intrusos.
Estas pequeñas hormigas que
explotan habitan en las selvas tropicales
del Sureste Asiático.
Generalmente anidan en árboles de
dipterocarpáceas (árboles tropicales) y sus colonias pueden contener miles de
individuos.
Muchos animales se involucran en
la guerra química, haciendo cocidos en sus propios cuerpos para someter a sus
presas o asustar a los enemigos. Las criaturas venenosas, que incluyen serpientes,
arañas, insectos, peces, cefalópodos, anfibios, reptiles e incluso algunos
tipos de mamíferos , entregan sus toxinas con picaduras, puñaladas o mordiscos.
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