Científicos alemanes
descubrieron un nuevo modelo de anticipación para el fenómeno de “El
Niño” y advierten 75% de probabilidad que ocurra este año convirtiéndolo
en tórrido.
A nivel mundial los climatólogos advierten que Australia, el sureste asiático, India y África, podrían ver sus cultivos afectados por la sequía, de persistir el modelo que marcan las actuales condiciones.
Muchos se acuerdan de los efectos que tuvo el fenómeno
El Niño en el mundo entre 1997 y 1998.
Lluvias
torrenciales, inundaciones, incendios forestales que devoraban todo lo
que se encontraban a su paso, sequías que dejaron sin agua a miles de
personas durante semanas,...a esto hay que sumarle la escasez de pesca y la muerte de ganado y cultivo.
la agencia espacial estadounidense considera el de este 2016 LA CORRIENTE DEL NIÑO, sera comparable a lo que muchos llamaron el “fenómeno monstruoso” de hace 18
años.
El Niño desconcierta a los expertos. Se sabe que es cíclico y que se forma entre un periodo de dos a siete años.
Las condiciones están dadas dentro de esos parámetros este año, por lo
que los científicos han determinado un 76% de probabilidades de que El
Niño se genere en 2016. Si la predicción se confirma, en tanto la Oscilación del Sur se desarrolle habrá más calor que el habitual.
Además de tener en cuenta que el fenómeno se extiende durante unos dos
años, probablemente las altas temperaturas alcancen también al año
próximo.
Mientras tanto los climatólogos que se rigen por el sistema
convencional, entienden que deberemos esperar hasta junio al menos para
establecer con certeza si están dadas las condiciones para que aparezca
El Niño. Ello se podrá confirmar cuando las corrientes cálidas
subacuáticas del océano Pacífico comiencen a desplazarse desde el
Ecuador hacia el oeste sudamericano. El llamado ciclo de la Oscilación
del Sur El Niño reinicia su actividad entre abril y junio
Así como ocurrió en 1992, 1998, 2004 y 2010, las aguas superficiales
provenientes del centro del océano Pacífico tropical se están calentando
y avanzan hacia Suramérica. El fenómeno del Niño se está gestando y esa
ola de calor traerá inevitablemente fuertes alteraciones del clima,
principalmente en Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia.
En Europa los trastornos son mucho menores que en el resto del mundo aunque pueden sufrir alguna sequía, menor que la de los países asiáticos.
Y como se forma el Niño?
Cuando El Niño se presenta se produce
una bajada en la presión atmosférica sobre el océano Pacífico Ecuatorial y aumenta al norte de Australia.
Los vientos alisios, que soplan de este a oeste empujando las aguas cálidas hacia los mares indonesios, se debilitan o incluso desaparecen provocando, tanto en la atmósfera como en los
océanos, grandes anomalías.
Los vientos alisios no tienen fuerza para arrastrar las aguas cálidas
superficiales hacia las costas asiáticas, entonces regresan a las
costas americanas formando la contracorriente El Niño. Ello origina
efectos atmosféricos y oceánicos contrarios a los tiempos normales. Es
decir, en las costas asiáticas aparecen las sequías, los incendios en
los bosques, etcétera.
A su vez, en las costas americanas se desatan
grandes temporales tropicales, que acarrean aluviones e inundaciones.